Una de mis combinaciones favoritas es la de tomates, carne y queso. La más sencilla por supuesto, es la salsa bolognesa y supongo que la siguiente receta es una variación de la misma. La carne mechada es sencillamente deliciosa, queda tan tierna que no es necesaria cortarla con cuchillo, se deshace fácilmente con el tenedor y puedes comerla con el acompañamiento que quieras. Además que puedes preparar un sándwich con la misma y quedará súper húmedo con la rica salsa de tomates hiper-extra condimentada.
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